martes, 7 de septiembre de 2010
SEMINARIOS, ENCUENTROS, CONGRESOS
"El compromiso con los derechos de la infancia y el derecho a la educación", que realizaremos el jueves 11 de marzo en el Parque Biblioteca León de Greif (La Ladera), de 8:00 a.m. a 12 m.
El problema de deserción escolar
La pregunta de esta semana, es: ¿Por què los niños se van de las escuelas?
La opiniòn del períodico El Colombiano:
Deserción escolar, una de las peores crisis que afronta la Comuna 13 de MedellínCaracol | Agosto 31 de 2010
En la Comuna Trece, una de las más afectadas por esta situación de violencia, se estima que unos 700 muchachos han dejado de ir a las aulas, porque que sus papás han sido amenazados o asesinados, por que sus familias han tenido que desplazarse a otros barrios, por no cruzar las fronteras invisibles o porque decidieron entrar a un combo.
Solamente en la institución educativa Eduardo Santos, donde este año han sido asesinados varios estudiantes, 346 muchachos han abandonado las aulas, el 90 por ciento de ellos debido al conflicto.
Una circunstancia similar viven otras Instituciones Educativas de la Comuna Trece, como Las independencias, Saúl Londoño, Estella Vélez, y El Corazón.
Para evitar la deserción escolar, en algunos planteles con apoyo de la Alcaldía, han establecido rutas especiales de buses custodiados por la policía, en los cuales recogen y transportan a los estudiantes de sus casas a los planteles.
Tras los enfrentamientos entre las bandas, también es común que los estudiantes dejen de asistir a las aulas, y ocurren dramas como los de algunos muchachos que lleven hasta tres meses sin poder concurrir a clases.
El desplazamiento forzado intra-urbano, entre enero y julio del presente año unas 2 mil 336 personas debieron abandonar sus viviendas, hacen que lo que se vive en Medellín se deba asumir como una verdadera crisis humanitaria.
La opiniòn del períodico El Colombiano:
Deserción escolar, una de las peores crisis que afronta la Comuna 13 de MedellínCaracol | Agosto 31 de 2010
En la Comuna Trece, una de las más afectadas por esta situación de violencia, se estima que unos 700 muchachos han dejado de ir a las aulas, porque que sus papás han sido amenazados o asesinados, por que sus familias han tenido que desplazarse a otros barrios, por no cruzar las fronteras invisibles o porque decidieron entrar a un combo.
Solamente en la institución educativa Eduardo Santos, donde este año han sido asesinados varios estudiantes, 346 muchachos han abandonado las aulas, el 90 por ciento de ellos debido al conflicto.
Una circunstancia similar viven otras Instituciones Educativas de la Comuna Trece, como Las independencias, Saúl Londoño, Estella Vélez, y El Corazón.
Para evitar la deserción escolar, en algunos planteles con apoyo de la Alcaldía, han establecido rutas especiales de buses custodiados por la policía, en los cuales recogen y transportan a los estudiantes de sus casas a los planteles.
Tras los enfrentamientos entre las bandas, también es común que los estudiantes dejen de asistir a las aulas, y ocurren dramas como los de algunos muchachos que lleven hasta tres meses sin poder concurrir a clases.
El desplazamiento forzado intra-urbano, entre enero y julio del presente año unas 2 mil 336 personas debieron abandonar sus viviendas, hacen que lo que se vive en Medellín se deba asumir como una verdadera crisis humanitaria.
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